Las apuestas han generado una gran expectativa en mente. Claro existen expectativas una más factible que otras.
No es necesario ser un experto para saber que el valor de Bitcoin en estos tiempos no se ha comportado como muchos quieren. Al parecer, no cuenta con esa fuerza suficiente para volver a subir. Apoyándose en soportes muy débiles. Muchos inversionistas están a la expectativa, porque las predicciones no son muy alentadoras. En estos tiempos, no logramos confiar en los inmortales alcistas. Porque los inmortales alcistas no son neutrales. Siempre serán alcistas. La tendencia los ciega. Eran especuladores en $68K. Son especuladores ahora. Son siempre especuladores, porque BTC para muchos, se ha transformado en una fe. El inversionista, se ve en la necesidad de ser más objetivo. Cuando la ventaja es nuestro bolsillo, los pensamientos y las aficiones deben pasar a otro plano.
La meta del inversionista es crecer económicamente. Y, para conseguir esto, debe comprar monedas digitales baratas y vender caro. Eso aparenta que compra, vende o se conserva basado en un interés. Por lo tanto, identificar el costo justo de Bitcoin no es una actividad fácil, gracias a que se fundamenta en un activo no lucrativo. Aunque sabemos que el sentimiento y las circunstancias macroeconómicas tienen un papel fundamental. Bitcoin es y seguirá siendo un activo risk-on. En otros términos, es un activo demasiado especulativo. Aunque la intención no es insultar a la moneda digital.
¿Qué es Bitcoin?
Bitcoin es una moneda digital de código frente a una base de datos. Se fundamenta en una serie de dígitos y letras dentro de una red de monitores. No funciona como una granja. No es una compañía. No es un metal precioso. Bitcoin es simplemente un código. Y ese código está basado en una tasa de cambio para una sociedad. O sea, ese código domina un precio.
¿Por qué hay usuarios que están dispuestas a pagar por un código?
Unos por pensamiento. Existen muchos liberatorios, capitalistas y conservadores que utilizan Bitcoin como una especie de moneda para poder emanciparse de lo que son los gobiernos. Otros por beneficio. Utilizan la tecnología para dar inicio a capitales y evitar fricciones. Y otros por medio de inversión a largo plazo. Se presume que el costo de Bitcoin aumentaría a medida que las personas se sumen al movimiento en Immediate Edge. O sea, se adquiere hoy, esperando un mejor costo mañana. Y un mejor costo es posible con un incremento de la demanda.
Ese incremento de la demanda se basa en dos cosas: Personas y liquidez. Las personas se unen gracias a la avidez. Si la gente piensa que el precio aumentará compran. Y esas mismas adquisiciones son las que suben el costo. En el fondo, se fundamenta de una predicción autocumplida. Claro que la seguridad necesita ofertas. Y, por muchos años, la historia ha sido la oferta para la llegada de este capital institucional.
Por este motivo las predicciones siempre son muy optimistas. Y por eso ofrecen más que un candidato a un puesto de gobierno. El panadero siempre deseara vender su pan. La sociedad Bitcoin siempre deseara captar capitales.
Para el 2020, el valor del Bitcoin cayó gracias a las aprensiones en medio de la pandemia. Esa dificultad dura dos meses y el costo empieza a subir debido a los movimientos de la Fed. De marzo hasta diciembre (2020), el valor del Bitcoin incrementó 4X, ubicándose nuevamente cerca a precios históricos del 2017 de ($20K). Después en el 2021, el valor aumentó 3X consiguiendo un precio récord de $68K. 68 mil es la cantidad que logramos conseguir después de las ayudas de liquidez más importantes de la historia. Se lograría decir que se vivió una racha de 2 años bajo circunstancias ideales.
Se espera que para este fin de año Bitcoin logre un incremento del 300% en lo que resta de año. Aunque no puede que este año sea un boom alcista con incitaciones favorables. Pero si seria un año de recuperación para los grandes inversionistas y países que lo adoptaron.
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